Donde duerme la tinta...

 

"Donde duerme la tinta"

Anoche soñé contigo,
pero no dolía.
Era como mirar una estrella fugaz
sin pedirle nada,
solo dejarla pasar
y sonreír en silencio.

Tu voz no era un eco que arde,
era brisa.
Tus ojos,
ya no fantasmas de lo que no fue,
eran faroles apagados
que alguna vez alumbraron mi camino.

Y ahí estabas,
como si nunca te hubieras ido,
pero también,
como si por fin entendieras
que no tenías que quedarte.

Me hablaste con la mirada,
como siempre lo hacías,
y yo entendí sin preguntar,
porque algunas respuestas
no necesitan palabras,
solo tiempo.

Tus huellas siguen en mí,
pero ya no pesan.
Son parte del mapa,
no la ruta.

Y la tinta que llevabas en la piel,
esa que tanto miraba sin entender,
ahora la llevo yo,
no como marca,
sino como recuerdo
de lo que fuimos
cuando todavía soñábamos
el mismo sueño.